Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Siria

De iconos y conciencias

Imagen
Dicen que una imagen vale más que mil palabras. Pero en este caso las palabras se llenan de rabia e indignación.  En los últimos días, las imágenes nos han dado una ostia en la cara. Una ostia para que espabilemos. Un guantazo, en toda regla, para remover nuestras entrañas y nuestras conciencias. La fotografía del pequeño Aylan es una bofetada al Norte capitalista, desarrollado y próspero. Ese Norte que concede el premio Nobel a un señor de la guerra y lo hace sin sonrojarse (…pero que perverso es todo esto…). Me duele mucho esa escena. Me duele, porque somos incapaces de pensar más allá. De empatizar con otras realidades. Me duele, porque los derechos humanos son un papel mojado de buenas intenciones que no valen para nada. Mientras tanto la ONU hace ‘mutis por el foro’. No me salen las palabras y se me crea un nudo en el estómago. Me cuesta mucho entender esta barbarie; las guerras, el fanatismo religioso, la venta de armas, los asesinatos de niñas y niñas,… ...

Anatomía de un abrazo

Imagen
Los abrazos son terapéuticos. Nos auxilian, nos reconfortan, nos hacen sentir que estamos vivos. Los abrazos siempre nos transportan. Nos curan, nos alivian, nos ayudan a calmar el dolor. Hay abrazos grandes y pequeños. Intensos y breves. Hay abrazos que se dan con pasión, con dolor, con cariño. Abrazos que no se olvidan nunca. También hay abrazos de despedida. Abrazos de reconocimiento. Los hay dulces y cuidadosos. Hay abrazos de madre, de abuela, de hijo. Abrazos de novios. Abrazos pegajosos. Abrazos en los que sin querer se te cierran los ojos. Hay abrazos para luchar contra la adversidad. Abrazos que no resuelven nada, pero que les damos por si acaso. Si ha habido algo que me ha impactado estos días atrás ha sido el abrazo que Yerai daba a su padre, el periodista Javier Espinosa al bajar las escalerillas del avión que le traía de vuelta a casa. Ese abrazo iba cargado de meses de ausencia. Yerai le recibió con los brazos bien abiertos, con una flor amarilla y con una pr...