No podemos callar ante el genocidio del pueblo palestino

“Para escribir una poesía que no sea política, Debo escuchar a los pájaros, Pero para escuchar a los pájaros, Los bombardeos deben cesar”. Marwan Makhoul Escribo con la garganta rota de tanto gritar contra el silencio. Escribo con la rabia acumulada de ver cómo un pueblo entero es masacrado ante los ojos del mundo, sin que nada ni nadie logre detener la barbarie. Lo que sucede en Gaza no es una guerra: es un exterminio planificado, un genocidio ejecutado con misiles, hambre y silencio cómplice. Día tras día vemos a niñas y niños enterrados bajo los escombros, a familias enteras borradas del mapa, hospitales bombardeados y escuelas convertidas en cementerios. Y mientras tanto, los gobiernos occidentales se limitan a pronunciar palabras huecas de “preocupación” mientras siguen sosteniendo al asesino con armas, dinero y diplomacia. No es un conflicto: es una vergüenza histórica que nos hunde como humanidad. Las cifras son insoportables. El genocidio en Palestina ha dejado un...