jueves, 10 de mayo de 2012

Educación para la utopía*



La Real Academia Española define la palabra utopía como un: ‘plan, proyecto, doctrina o sistema optimista que aparece como irrealizable en el momento de su formulación’. Este es el marco de la fotografía que a continuación les describiré.

Me apetece compartir con Uds. algunas claves de lo que he venido a denominar como ‘Educación para la utopía’. A continuación tratare de ir detallando cada uno de los elementos.

El primero de ellos es la información. Ser ciudadano o ciudadana con mayúsculas implica necesariamente estar bien informando. Debemos desaprender y eliminar de nuestro alcance todas aquellas informaciones tóxicas que nos idiotizan, como por ejemplo: ver fútbol los siete días de la semana. Así como aquellas otras que producen fenómenos de imbecilización, por ejemplo: creerse a ‘pies juntillas’ todo lo que cuentan en Telecinco o en Intereconomía. Ambas no nos aportan nada, solo narcotizan (No nos vamos a poner ahora hablar de los efectos que provocan las drogas, sean del tipo que sea).

El segundo elemento, desterrar el fatalismo imperante. Vencer el miedo. Pensar en clave de que es posible cambiar. Los poderes públicos están generando discursos que tienen como objetivo prioritario culpabilizarnos de que somos los responsables de la crisis y que como hemos vivido por encima de nuestras posibilidades, ahora tenemos que pagar los platos rotos. Y esto es una mentira, como un campano. Debemos aprender que podemos construir el imaginario contrario. Recuerden que la utopía es un sistema optimista.

Tercero, enseñar a diferenciar muy bien la derecha de la izquierda. Mientras unos conservan, otros progresan. Y la utopía es avanzar, proyectar, en definitiva, realizar.

El cuarto, educar en un modelo de desarrollo económico sostenible que haga hincapié en la impulso de unas pautas de consumo responsable. Algunos expertos hablan, que más que una crisis económica, es una crisis medioambiental. Debemos reaprender a comprar productos locales, esto incidirá positivamente en la economía del lugar donde vivimos. No tiene ningún sentido disfrutar, cuando no es temporada, un kiwi procedente de Australia. Se nos quitarían las ganas, si sabemos todos los kilómetros que ha recorrido y todo el consumo energético que ello ha generado.

El quinto elemento, dar el paso definitivo para ser verdaderos ciudadanos solidarios. Para ello, la mejor estrategia es ‘incendiar’ la sociedad individualista. ¿Y cómo se hace?, muy sencillo, aprender a construir y crear redes sociales de apoyo ciudadano. Espacios para compartir ideas. Tiempos que permitan encontrarnos.

El sexto y último, mirar hacia adelante. Abrir la ventana a la utopía. Creernos que podemos aprender a generar cambios. Fomentar la creatividad e inyectarnos dosis de optimismo. Todo esto, no nos lo podrán arrebatar ni el PP, ni los mercados, ni Lehman Brothers, ni Goldman Sachs, ni la madre que los parió,…

Emitido el día 10 de mayo de 2012, en el programa "Hoy por hoy" de la Cadena SER Palencia.

(*) Me voy a permitir la licencia de dedicar esta entrada a todas las amigas y amigos; compañeros y compañeras con los que tuve el placer de encontrarme en el VI Congreso Estatal de Educación Social, celebrado en Valencia la semana pasada. También, y muy especialmente, a todos los que me animan a seguir y a los que siguen el blog. En esta dedicatoria quiero incluir a Arcadi Oliveres y a Leo Bassi ya que son los inspiradores de estas palabras.


11 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo contigo "utópico".

    Un saludote utópico, Irma.-

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  2. Amosss estupendoooo!!! Viva la utopía
    y viva la educación social.

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  3. Muchas gracias Irma y Clara Isabel por vuestros comentarios.

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  4. "Como decíamos ayer,...", comparto plenamente tus sentires y opiniones. Enhorabuena por expresarlas tan bien como lo haces. Al leerte me he acordado de un pensamiento de Eduardo Galeano:"La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para qué sirve la utopía?, para eso, sirve para caminar."
    Los que buscamos y deseamos el mejor mundo, más que un mundo mejor, sabemos que la utopía es el único camino.

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    1. Mar, muchas gracias por recordar a Galeano. Una joya de la literatura latinoamericana que pone de manifiesto realidades, a las que normalmente, damos la espalda. Un beso muy fuerte.

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  5. La recientemente aprobada “Declaración de Valencia” dice: “Declaramos nuestro compromiso a buscar soluciones a las alternativas que se están dando para superar la actual crisis económica, ofreciendo propuestas basadas en la dignidad, las capacidades y fortalezas de las personas, rompiendo el fatalismo imperante”.
    ¿Es esto utopía? Entonces a mí que me apunten en el bando de los “utópicos”. Gracias por tus palabra que comparto plenamente.

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    1. Que te voy a contar, que no te haya contado ya. Muchas gracias por tus palabras. No nos queda otra la 'Declaración de Valencia' será la bandera. Un abrazo.

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  6. Como decía Lenon "Demosle una oportunidad a la utopia", bueno más o menos. Maravilloso articulo Javier. Un abrazo

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    1. Muchísimas gracias Vicent. Ha salido de dentro. De todas las maneras tengo que agradecer a todos y a todas los que formáis el COEESCV, la posibilidad que nos disteis a los/as participantes en el VI Congreso Estatal de conocer, en primera persona, los discursos de Arcadi y Leo. Ambos, y creo que no exagero, formarán parte de un trocito de la historia de los congresos estatales promovidos desde el ámbito profesional. Gracias. Un abrazo.

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  7. Y a mantenerse a distancia de quienes nos llamen "utópicos" queriendo servirse de ello como una descalificación; al final todo virus es susceptible de contagiar... Recogiendo palabras de Ramón Flecha, "Quienes dicen ‘dejémonos de utopías, bajemos a la realidad’ nunca mejorarán la realidad y ni siquiera llegarán a conocerla. Quienes dicen que el pesimismo es el optimismo inteligente son muy poco inteligentes; nunca mejorarán la educación pero, eso sí, verán refrendada su profecía que fatalmente se cumple, que las cosas están mal y continuarán peor”. Un abrazo tocayo!

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    1. Pero tenemos antivirus, no? (por lo menos quiero creer que lo tenemos). Gracias por recordar a Flecha. Un beso fuerte, amigo.

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