2013, el año del sentido común

Finalizando el año me enfrento a la elaboración del último post de 2012. En mi cabeza aparecen dos ideas: echar la vista atrás o mirar al presente más inmediato. Hablar del pasado no nos aportará ninguna novedad. En cambio afrontar lo que está por venir se plantea como un importante desafío para todos aquellos que pensamos que existen alternativas y que, a pesar de toda la escabechina llevada a cabo, no es momento de una rendición. Como verán, finalmente he decido que es mucho más interesante y motivador hablar de lo que pasará mañana. Para un grupo importante de la ciudadanía 2011 fue declarado el año de la negación; ¿cómo es posible que todo esto esté pasando aquí?. En cambio, 2012 para algunos fue el de la resignación; … no podemos hacer nada, tendremos que asumir lo que nos echen encima… Para la gran mayoría, fue el de la indignación con mayúsculas. Otros tantos, durante 2012, defendían que el optimismo, era la única salida para salir a flote. Desde mi punto de vista, un ...